La noche.

29/07/1967

Estamos de campamento, después de un duro día de ejercicios físicos en el campo de obstáculos toca descansar. Eso creía yo, pero nada mas lejos de la realidad. Esta noche me toca guardia junto a Cameron, Perkins y Martinez. Espero que se nos de bien la noche, aunque tengo un mal presentimiento y eso no me gusta.

La noche era fresca. Algo raro para estas fechas. También era oscura no había luna, sólo se veían las estrellas. Era una noche perfecta para estar junto a una chica en plan romántico mirando al cielo. Pero no, esa no era una noche romántica ni estaba a mi lado se encontraba una chica. A quien tenía al lado roncando como un oso era a mi primo Cameron. Sus ronquidos hicieron que me despertara antes de hora. El reloj estaba apunto de dar las dos de la madrugada y todos estábamos metidos en las tiendas de campaña. Escuché el sonido de unos pasos acercándose a la tienda.

-¡Mclearn! vamos, os toca. El que hablaba era Blake, su turno había terminado.
-¿Que tal la guardia?, pregunté yo. A lo que blake me contestó -Bien, ha sido tranquila me di un par de vueltas por el perímetro cruzándome con Anderson y después me puse bajo un árbol y me dormí media hora. Nadie me ha visto.
    Yo le miré con cara de asombro y le dije: -joder que suerte, vaya guardia más fácil, espero que la mía sea igual.

Ya estábamos todos, Martinez, Perkins, Cameron y yo. Todos teníamos unas caras de sueño impresionantes. La zona donde teníamos que hacer la guardia era como un cuadrado que medía cada lado alrededor de un kilómetro. Se supone que cada uno nos tenemos que poner en una punta y dar vueltas alrededor el perímetro. Dividimos el perímetro en 4 lados y los llamamos A, B C y D. Seguidamente acordamos entre todos que cada 20 minutos nos relevaríamos en los puntos. Yo estaría en el punto A. Martinez en el punto B. Cameron en el punto C. Y por último Pekins estaría en el punto D. Yo a los 20 minutos pasaría por el punto B. Martinez a los 20 minutos pasaría al punto C donde se encontraría con Cameron y así sucesivamente.
 
Empezaba la guardia. El primer turno de relevos los hicimos sin ningún problema sin darnos cuenta ya eran las 3 de la mañana. La tensión que teníamos al principio de la guardia se disipaba poco a poco. Nos relajamos incluso me entró un poco de sueño. Estaba pensando que cuando llegara al punto B, me dormiría 20 minutos y que Martinez hiciera lo mismo cuando llegara con Cameron.

Pasaron los 20 minutos, me disponía encontrarme con Martinez en el punto B. Faltaban unos pocos metros y no veía a mi compañero. ¿Estará meando? me pregunté a mí mismo. Llegué al punto exacto y allí no estaba Martinez. La oscura noche no ayudaba nada, no podía ver a lo lejos. Tampoco llevaba linterna. Intenté subir el tono de voz llamando a Martinez en la oscuridad de la noche. No obtuve respuesta.

Me estaba empezando a preocupar llevaba alrededor de 10 minutos en el mismo sitio y no estaba mi compañero. Me dirigí al encuentro de Cameron en el punto C. Cuando llegué allí tampoco se encontraba Cameron. -Joder, donde mierda se habrán metido estos tios, Dije yo. La tranquila noche se estaba transformando poco a poco en una angustiosa noche. 

No me lo pensé dos veces y fuí al encuentro de Perkins a la carrera. Tampoco estaba en su puesto. -¿Pero que clase de broma es esta?¿Donde coño están todos?. Volvía al punto de partida corriendo cuando en la oscuridad de la noche escuché mi nombre. Alguien me llamaba, el sonido provenía de una zona con extensa maleza. No veía nada, me acerqué poco a poco a donde provenían  esa voz que me llamaba. -¿Quién eres? ¿Cameron, eres tu? ¡vamos deja de hacer bromas, esto no tiene gracia!

Escuché el sonido de una piedra al caer contra el suelo,me di la vuelta. En ese momento detrás de mi escuché: -¡hola Mclearn! me giré y antes de que pudiera reaccionar alguien me pego un puñetazo y caí al suelo. Estaba totalmente dolorido en el suelo. No veía nada, solo escuchaba como pasos acercándose. Me intenté levantar y de pronto sentí un duro golpe en mi espalda que me dejó KO en el suelo.

-¡Travis, Travis!, ya vuelve en sí. ¡Venga tío despierta!. Poco a poco me iba espabilando. -¿Pero que coño ha pasado? ¿Donde mierda estamos? Perkins respondío primero y dijo: -¡El cabrón del Sargento nos ha capturado y nos ha traído a este puto agujero!
-¡No puede ser, no me lo puedo creer! ¡que hijo de puta¡

Estábamos atados de pies y manos, los 4 nos encontrábamos prisioneros en un agujero de unos 5 metros de alto. La salida en el techo, se encontraba tapada con arbustos. 

Los primeros rayos del sol se filtraban a través de los arbustos. Alguien estaba quitando todas las ramas que habían encima de aquel mugriento y asqueroso agujero. Cuando todos los arbustos fueron eliminados se asomaron numerosas cabezas. Eran nuestros compañeros, seguidamente apareció el artífice de esta gran putada, el Sargento Galizia.

-Seguramente, os preguntareis la razón por la que estáis metidos en este agujero. Simplemente os quería demostrar que sois unos mierdas y que no se puede bajar la guardia ni un momento. Os estuve observando y noté cierta relajación por parte de todos. Eso me animó a llevar a cabo mi plan para daros una lección. Esto es lo que os puede pasar en Vietnam. Esos enanos amarillos os pueden capturar y creerme no van a ser tan buenos como yo. ¡Os torturarán para sacaros información y luego os meterán un tiro en la sien!-.

-Esto va por todos, ¡no quiero ni un minuto de relajación cuando estéis en una misión! ¿queda claro?

    

El campamento.

26/07/1967

Esta es la primera vez que dormiremos fuera de los barracones. Nos hemos ido al sur del fuerte para acampar. Provistos de todo el equipo necesario en nuestras mochilas nos dispusimos a recorrer otros 7 km hasta nuestro destino. Esta vez no había sorpresas la misión estaba clara llegar al punto de acampada. Pero claro con todo el equipo, aproximadamente unos 30 kg de peso. Los 49 hombres incluido Perkins anduvimos por la senda de la carretera. Un camino que no estaba mal del todo. 25 y 24 hombres por cada carril en el mismo sentido de la marcha.

El Sargento va detrás nuestra por si acaso se queda alguien rezagado, esta vez no permitirá que nadie se quede el último. La primera frase de apoyo moral por parte de Galizia fue para Perkins. Le dijo textualmente que como se tirara cansado al suelo iba a estar fregando letrinas y haciendo camas hasta que se licenciara. Parece que Perkins se lo tomó en serio, llegó a la zona de campamento igual que todos.

Al llegar a la zona de campamento, nos encontramos un solar bastante grande y vacío. A la derecha había como un extenso campo de entrenamiento con grandes obstáculos. Dejamos las mochilas y nuestros enseres en el suelo y nos dispusimos a montar las tiendas. -Tenéis que montar una tienda por cada dos personas- gritó el Sargento. Yo compartiría tienda con Cameron. El montaje de la tienda fue fácil. tenía sus varillas y la lona e iba anclado al suelo. El Sargento se paseabas por toda la zona observando como se efectuaba el montaje de las tiendas. No estaba muy contento con algunos compañeros y se lo hacía saber a base de insistentes gritos.

Cuando ya montamos las tiendas, nos preparamos para todo el circuito de obstáculos. Básicamente consistía en subir la cuerda, salto de especie de vallas de madera, colgarse de una cuerda y llegar al otro extremo sin caer a la charca, subir un muro de madera de unos 5 metros y luego bajarlos. El Sargento se empleó a fondo con los más débiles, no les dejaba ni un minuto de tranquilidad. Quería motivarlos e incitarles a que lo hicieran bien.

Era la hora de comer, todos estábamos hambrientos, teníamos una comida fabulosa enlatada. El menú no estaba mal y más cuando tienes hambre. Consistía en una Sopa de de cebolla y carne de cerdo con tomate, todo en latas. Teníamos también el gran lujo del café. A mi me encanta el café. Aunque este era una basura. Había que empezar a acostumbrarse a las raciones de comida enlatada porque esto sería lo que tendríamos que comer en Vietnam. -¡Oh Dios, echo de menos una hamburguesa con bacon y queso con patatas y una pepsicola bien fresquita!-

Por la tarde más entrenamiento, esta vez tocaba atravesar alambres y arrastrarse por el suelo. Al terminar la jornada estábamos llenos de mierda hasta las orejas.

Al termino del día nos bañamos en un río que atravesaba la zona en la que estábamos. También pudimos medio lavar nuestra ropa.

Estábamos todos en formación se suponía que el Sargento pasaría lista y nos iríamos a dormir después de este maratoniano día. Pero no, el Sargento todavía nos quería putear más y no se le ocurrió otra cosa que organizar guardias de noche.

-Bien esta noche habrá que hacer guardias. Estas guardias serán de 10 a 12, de 12 a 2, de 2 a 4 y de 4 a 6. A las 6 en punto de la mañana tocaré diana-.

-Habrán 4 personas por guardia. Me hacen falta 16 voluntarios, para esta misión. ¿Quien se ofrece?
Todo el mundo estaba callado solo se oía el sonido de los grillos de la noche.
-Como nadie se ofrece voluntario, yo elegiré a los mierdas que harán guardia esta noche.-
-En el primer turno, lo harán, Batkins, Fog, Crower y Jones.
-El segundo turno, lo harán, Anderson, Mendez, Trewer y Blake.
-El tercer turno, lo harán, Martinez, Perkins, Berdone(Cameron) y Mclearn.
-Y el cuarto turno yo mismo avisaré a los voluntarios...

Todos nos miramos extrañados, ¿que estará tramando esta vez Galizia? y por cierto, joder, ¡otra vez me toca el tercer turno!. El Sargento me escuchó y me dijo: -¿Algún problema Mclearn?-
-¡No mi Sargento!, exclamé yo.

Sea lo que sea esta madrugada promete y como siempre yo estoy metido en el asunto.

 

¿Quién es el enemigo?

24/07/1967

Hemos sido reclutados para luchar en Vietnam, pero realmente no sabemos mucho del enemigo. Cuando digo enemigo me refiero en general, a los peligros que nos encontraremos en Vietnam. ¿Como es Vietnam? ¿que clima tienen allí? ¿Quién ese tío llamado Ho chi minh? ¿Por qué luchamos? y también una pregunta tonta pero que tiene mucho sentido ¿nosotros mismos somos un peligro para nosotros mismos? A estas preguntas y otros detalles nos lo intentará aclarar el Sargento. 

Después de unos días muy dificiles, no viene mal escuchar y aprender un poco más sobre nuestros enemigos.

-El tamaño de Vietnam es mas o menos similar al estado de Nuevo México. Limita al norte con china, al oeste con Laos y Camboya. Tiene en el este y el sur el mar de la China Meridional. Los dos ríos mas importantes que pasan por Vietnam son el Río Rojo y el Mekong-.

-Uno de vuestros principales enemigos será el clima. Es subtropical con humedad alta. En el norte se producen inviernos secos y veranos húmedos. En las partes sur y centro se caracterizan por las altas temperaturas y las fuertes lluvias-.

-Más de la mitad del territorio está cubierto por montañas y montes boscosos, tapados con una vegetación de jungla casi infranqueable. En el tránsito por caminos y senderos estaréis expuestos casi con total seguridad a constantes emboscadas-. 

-Como sabéis Vietnam está dividida en dos. Vietnam del Sur y del Norte. La principal razón por la que Estados Unidos está en el conflicto es la de evitar que el avance del comunismo se extienda por todo el país. Por eso nosotros estamos comprometidos con Vietnam del Sur y tenemos que ayudarle a mantener su independencia.

-El Vietcong es una organización guerrillera que pelean contra Vietnam del Sur. Es el objetivo a eliminar. Aunque con apariencia de campesinos, pequeños y delgados no tenéis que subestimarlos. Esta gente está en su casa. Conoce perfectamente el terreno. Juega con los elementos de la naturaleza. Tienen una moral alta y lucharán hasta la muerte por su país. Están en constante movimiento utilizando el terreno como camuflaje y atrincheramiento-. 

-Ho chi minh. Este personaje es el principal comunista. Es el presidente de Vietnam del Norte. Está en busca y captura, pero será dificil que lo puedan coger. Es uno de los ideólogos del Comunismo. Su misión es que el pueblo de Vietnam sea comunista entero.

-Y por último, quiero hablaros de vosotros mismos, el soldado americano. Vosotros tendréis que ver y sentir cosas terribles. En ocasiones seréis un peligro para vosotros mismos. Viviréis las consecuencias de la guerra en primera persona. Levantarse cada mañana con la sensación de que podéis morir acaba con la cordura de uno.Por eso es mejor no pensar. Tendréis que ser fuertes psicológicamente para superar tan dura prueba. No pretendo meteros miedo. Simplemente os cuento lo que hay-.

-Por lo tanto, no solo el Vietcong es nuestro enemigo, también nos tendremos que enfrentar a las duras condiciones climáticas del país, a la poblada selva y sobre todo a nosotros mismos. 

Consecuencias.

22/07/1967

Vi a mis compañeros llegar a los barracones en un estado lamentable, daban pena. Nosotros que habíamos venido en el camión de transporte junto al Sargento los estábamos esperando. Hasta él se dio cuenta de que estas maniobras habían sido pésimas. Pero por otro lado ¿que esperaba? Quizás pensó que en estos 20 días que llevamos de entrenamiento básico íbamos a hacerlo todo perfecto. Se equivocó. Los 29 hombres que supuestamente fueron eliminados en esta maniobra volvían lentamente del poblado.

Muchos venían totalmente asfixiados y exhaustos, con torceduras de tobillos, heridas en los pies, moretones por todos los lados,  etc.

Eran cerca de las diez de la noche. Hacía una hora que el penúltimo compañero había regresado y el Sargento todavía no nos dejaba libres. Había que esperar al último, ese era Perkins. El estado en el que venía Perkins era indescriptible. Desgarrado por el dolor de rodillas se le unió una torcedura de tobillo en la cual no se podía ni quitar la bota. Al que no veía por ningún sitio era a Monrow. ¿Que habría sido de él?

¡A formar!   gritó el Sargento.  Los que habíamos venido en camión nos pusimos rápidamente en fila. Pero los otros compañeros, los que se habían pegado la paliza 5 km corriendo con todo el equipo no eran tan rápidos. Se oían murmullos y algunas quejas.

-Bien, ¡a callar todo el mundo!. No quiero escuchar ni el sonido del viento. En el día de hoy hemos realizado unas maniobras, simples y normales. Este es el pan de cada día en Vietnam. Con esto es con lo que os encontrareis allí. Mi misión es entrenaros, aleccionaros sobre lo que encontrareis en combate. Por eso las maniobras tienen que ser lo mas reales posibles, para que cuando estéis metidos en la selva sepáis reaccionar a las posibles adversidades-.

-Se que soy duro, no soy vuestro amigo, ni pretendo serlo. Tampoco soy vuestra madre. Muchos en estos momentos me odiaran. Pero dentro de unos meses os acordareis de mí. Y gracias a una lección que aprendisteis aquí os servirá allí. Y entonces os acordareis del cabrón del Sargento Galizia-.

-Estas maniobras han sido un desastre. De los 50 soldados que han salido con destino al poblado han sido eliminados 30. Estos 30 soldados han ido cayendo uno a uno en las trampas. Vuestro capitán Kenner lo ha hecho nefastamente mal. No ha tenido en cuenta la orografía del terreno donde se encontraba. No ha sabido motivaros para que estéis atentos y básica y fundamental no es un líder.  Del restante grupo de 25 han sobrevivido 19, entra dentro de lo normal. 

-Monrow está en la enfermería. Tiene el tabique nasal roto. Como mínimo tiene para 2 semanas. No se licenciará como todos el 4 de septiembre. Lo tendrá que hacer 2 semanas después-.

-Bien todo esto acarrea unas consecuencias. Lógicamente para los 29 soldados eliminados más uno más. Mclearn se une voluntariamente al club. Mañana estos 29 harán la cama a los otros 19 supervivientes. También limpiarán todo el barracón incluidas las letrinas. Como veis he sido benévolo y la sanción no será física, por esta vez-. 

¡Rompan filas!

El Sargento se había aprendido demasiado pronto mi nombre y eso no era bueno. Quería pasar inadvertido pero con los últimos hechos acaecidos eso ya parecía cosa del pasado. Algunos de mis compañeros que no estaban en mi grupo me preguntaban insistentemente la razón por la que me habían sancionado si yo era un superviviente. Yo les decía simplemente que el Sargento me había cogido manía. Aunque fue mi primo Cameron quien le dio el culatazo a Monrow en realidad yo tenía la culpa de lo sucedido. 

Teórica y práctica 3ª Parte.

19/07/1967

Allí estaba yo, asustado y sin saber bien que hacer. Al mando de 23 hombres. Mi misión era conducirlos hasta el poblado, coger la bandera y volver al barracón causando las menos bajas posibles.
En principio sonaba fácil pero había que tener en cuenta las trampas colocadas sutilmente por el Sargento, mis dos compañeros fuera de combate esperando asistencia sanitaria  y que si volvía con menos de 15 hombres el Sargento me lo haría pasar bastante mal.

-Es hora de irse, Perkins, tú te quedas aquí con Monrow. Cuando lleguemos al poblado mandaré asistencia sanitaria-. Perkins asintió con la cabeza. Pusimos a la sombra a Monrow para que no se desidratara. El golpe que le dio Cameron fue fuerte. Monrow estaba desorientado, no tenía idea de que había pasado. Supongo que el culatazo de Cameron le habría roto el tabique nasal. No paraba de sangrar. Perkins le ayudaba y le taponaba la nariz con un trapo.

-Vamos- dije yo enérgicamente. -Hay que tener cuidado donde pisamos. Iremos despacio y todos me seguiréis-. Iniciamos la marcha con nerviosismo y cautela. Hacía tiempo que habíamos perdido de vista al otro grupo y si habían sobrevivido nos tendríamos que encontrar en este camino, el A. Nosotros vamos por el camino A, que nos llevará al poblado. Pero para volver al barracón tenemos que coger el camino B, que es el camino que el otro grupo ha utilizado para ir al poblado. Y ellos volverán al barracón por el camino A.

-Según el mapa, tenemos que continuar por este sendero lleno de arboles y llegaremos a un río que hay que atravesar-. Iniciamos el camino del sendero en fila india todos íbamos mirando a todas partes por si veíamos algo sospechoso. De pronto cuando ya había pasado la mitad de grupo escuché como el sonido de un látigo y las ramas crujir. Era como una especie de bola grande que venía de un árbol.  -¡¡¡Cuidado!!!!- grité yo. Perry consiguió evitar la bola que se le venía encima. Saltó fuera del sendero y cayó en un foso de 3 metros. Crower que iba detrás no pudo evitar la bola y le dio de lleno tirándolo al suelo bruscamente. La bola reventó y soltó un humo blanco visible a gran distancia. 

Crower y Perry habían sido eliminados en 2 minutos ¡Increible!.-El cabrón del Sargento nos la ha jugado bien- dijo Cameron. Antes de llegar al río perdimos a mi amigo Brian por culpa de un cepo que le impidiéndole continuar. Cinco metros más adelante cayó Verenger en otro cepo. La cosa no podía ir peor.

Nos disponíamos a atravesar el río, no había mas remedio que atravesarlo si queríamos continuar.  -Primero me meteré yo y cuando yo os diga vosotros me seguiréis-. El agua bajaba clara y cristalina. Pensé que este era un sitio idóneo para tendernos una trampa y efectivamente era así. Observé como un hilo atado a un palo y el otro estremo del hilo atado a un palo y a una especie de granada. Era otra trampa del cabrón del Sargento. Rodeamos la trampa y pasamos sin sorpresas. Cuando atravesamos el río vimos a lo lejos el poblado. Llegamos hasta él sin problemas. Supongo que el resto de las trampas están ahí dentro, pensé yo. 

No había nadie, tampoco el servicio sanitario como nos dijo el Sargento. -Que raro- dijo Cameron extrañado. -El poblado tiene que ser una trampa en si-. -Según el mapa la choza donde está la bandera es esa de ahí- dije yo señalando la tercera choza a mano derecha. Me dirigía hacia la choza cuando escuché un click. Fred que iba detrás mía dijo ¡¡¡para!!! no levantes el pié. -¿Es una jodida mina?- pregunté yo medio asustado.-No creo que el cabrón del Sargento nos haya puesto una mina de verdad- dijo Cameron.

Fred se agachó y empezó a escarbar en la tierra hasta que vió que era una especie de bala y al lado un mecanismo que haría que al levantar el pié se disparara. No sabíamos si era de verdad o mentira. Mientras Fred presionaba la trampa hacia abajo, yo levanté mi pié y Cameron puso una piedra grande encima de la trampa. 
Por esta vez estaba salvado. Llegamos a la choza, con sumo cuidado abrí la puerta. Afortunadamente no pasó nada. Entramos y allí estaban las banderas encima de la mesa. -!Pero si hay dos banderas! ¿Como puede ser?- dije yo. Fred rápidamente ató cabos y dijo -yo creo que es porque el otro grupo no ha llegado al poblado, ha sido eliminado antes-. -Puede ser.

De pronto se escucharon ruidos de vehículos. -Vienen 2 camiones y un Jeep- dijo Rekons. Efectivamente, era el Sargento Galizia. Detrás del Jeep del Sargento venían 2 camiones de transporte de tropas con todos los chicos del otro grupo que habían sido eliminados y del nuestro también. 

-¡¡¡Bajaros todos de los putos camiones, vamos, vamos!!! El Sargento se acercó a mi y me dijo  -Bien Mclearn, creo que habeis conseguido las dos jodidas banderas y no solo eso si no que al final has conseguido mantener con vida a 19 hombres  -en comparación con el otro grupo que han sido eliminados todos, no está mal. ¡Así que subir al camión antes de que me arrepienta! 

En cuanto al resto, como el camino B está despejado de toda trampa porque sois unos mierdas y os las habéis comido todas. Los 5 km que faltan hasta llegar a los barracones... ¡¡¡los vais hacer a la puta carrera¡¡¡  

Nosotros volvimos en camión y los demás corriendo. Eso traería consecuencias. 

Teórica y práctica. 2ª Parte.

17/07/1967

Atención este capitulo contiene lenguaje soez.

Hoy es el día, todos estamos nerviosos. Es la primera vez que saldremos a recorrer un circuito donde nos esperan grandes dificultades. Lo principal es evitar las trampas cazabobos. Otro factor importante es calor. Son las 10 de la mañana y hace unos 32º y subiendo. Nos tenemos que acostumbrar a llevar todo el equipo. Estamos los 50 muchachos de muestro pelotón, esperando las ordenes del Sargento Galizia. La mitad de nuestro pelotón son de Ogden (Utah) y la otra mitad de Lubbock (Texas). 

Nuestro equipo básicamente consiste en: Uniforme de campaña, casco de acero, correaje básico, cuatro cartucheras, dos cantimploras, una mochila, un cuchillo, un chaleco antibalas y el fusil M-14. En la mochila llevamos unos 200 cartuchos empaquetados. Calculo que llevaremos unos 25 o 30 kg de peso.

-Bien es la hora, a formar¡¡¡ dijo el Sargento. Ahora os explicaré en que va a consistir la misión de hoy. El circuito consta de unos 10 km, son 5 km ida y 5 km vuelta. En el kilómetro 2 habrá dos bifurcaciones. Un grupo irá por un camino y el otro por otro camino. Con la ayuda de una brújula y un mapa, tenéis que llegar a un poblado y encontrar dos banderas, una para cada grupo, que estarán escondidas dentro de una choza. -Hay que elegir a dos soldados que actuarán como capitanes. Es a ellos a quien tenéis que obedecer. El batallón se dividirá en 2. 25 soldados para cada Capitán. Yo, junto con mis ayudantes iré detrás vuestra, a una distancia prudente, pero no os diré nada ni os ayudaré.  Cuando caigáis en alguna trampa, esta soltará humo y estaréis eliminados.

-Los que caigáis eliminados volveréis andando al barracón. Solamente los que se desmayen o tengan algún incidente grave podrán utilizar el servicio sanitario que se encontrará en el poblado. Los que utilicen el servicio sanitario serán sancionados físicamente cuando se recuperen. Y los que caigan en las bombas trampas también. ¡Así que por vuestro bien será mejor que no caigáis!

-Llevaréis a vuestras novias el  rifle M-14 sin munición, en esta misión no la necesitáis. Simplemente cargareis con ellas. Según los informes los soldados con mayor cociente intelectual del pelotón son: Monrow y Kenner. Tenéis que seguir sus ordenes, ellos os guiaran o por lo menos lo intentaran. Bien, que empiece el espectáculo nenas¡¡¡¡

"Madre mía, ¿Monrow y Kenner nuestros capitanes? esta si que es buena exclamé yo. "Estamos muertos" dijo Cameron. 
Monrow y Kenner se quedaron mirando durante unos minutos el mapa. Seguidamente nos dieron ordenes y avanzamos.

Hace un calor terrible no llevamos ni un kilómetro y esta jodida mochila me está destrozando la espalda. Eramos un batallón de 50 hombres, avanzábamos de forma desordenada y caótica. Cuando llevábamos recorridos 2 km uno de nuestros compañeros cayó al suelo. 

Era Perkins, el típico gordo, entraba dentro de lo normal. Monrow que era el capitán de nuestro grupo acudió rápidamente y le dijo:-Joder, Perkins no me jodas ¿que coño te pasa? levántate, todavía quedan muchos kilómetros y ya me estás jodiendo¡¡¡¡. Perkins con cara de agobio y totalmente ido le miró y le dijo que no podía más que aquí se quedaba. Monrow en un acto de desesperación le empezó a patear la barriga. Se me vino a la mente el altercado que tuve con Monrow en Ogden. Reaccioné y fui hacia él corriendo y le empujé tirándole al suelo. Monrow se levantó del suelo rápidamente y con el rifle me dio en en brazo y me tiró al suelo. Mi primo Cameron que estaba detrás de mi, le dio con la culata del rifle en la cara dejando a Monrow tirado en el suelo inconsciente.

El otro grupo de 25 se alejaba poco a poco, no se percató del altercado. Nuestro batallón se encontraba a 3 km de llegar al poblado. Nos encontramos con Monrow inconsciente en el suelo, Perkins asfixsiado y yo con el brazo posiblemente roto. Thomson se llevó las manos a la cabeza y dijo -¿que coño has hecho Cameron? le has dejado inconsciente¡¡¡ -Pegó a mi primo, dijo Cameron en voz baja. Mi amigo Fred intervino diciendo -¿Que vamos hacer ahora? tenemos que continuar, el Sargento nos va follar vivos como vea a Monrow inconsciente. 

Rápidamente intentamos reanimar a Monrow echándole agua en la cara. Poco a poco iba reaccionando pero no estaba ni mucho menos en condiciones de continuar. Al tiempo que intentábamos reanimar a Monrow, se escuchaban las primeras explosiones y gritos del otro grupo que iba cayendo en las trampas.

-Me cago en la puta, tenemos que pensar algo y rápido- dije yo. Cameron me preguntó -"¿Como estás?, estoy dolorido creo que este cabrón me ha roto el brazo".

De lejos se oía el ruido de un vehículo, era un Jeep. En él iba montado el Sargento Galizia. ¡Oh mierda!. Se acerca el Sargento, ahora si que estamos jodidos¡¡¡¡ dije yo. El Jeep se paró junto a nosotros, se bajó el Sargento con cara de pocos amigos y dijo. -¿Quién es el responsable de esto? -mi Sargento yo soy el responsable- dije yo con la voz entrecortada. -¿Así que tu eres el responsable de tener a estos dos mierdas en el suelo?
-ehh... sí, mi Sargento- Perkins con voz baja y en un momento poco propicio para hablar dijo:-Mi Sargento ha sido culpa mía si yo no... Galizia cortándole la palabra a Perkins le dijo con voz alterada:-¡¡¡cállate jodida sabandija, no quiero que me dirijas la palabra si yo no te lo mando¡¡

-Quiero que sea Mclearn el que me dé explicaciones-. Yo totalmente nervioso le expliqué lo sucedido. A continuación el Sargento dijo:  "Sabéis perfectamente que no tendría que intervenir. Esto va a tener consecuencias. ¡Sois unos mierdas, no servís para nada, con esta actitud durareis en Vietnam 24 horas, no más!. 

El sargento se quedó pensativo unos instantes. -Bien esto es lo que quiero que hagáis. A partir de ahora Mclearn será vuestro capitán, y tendrá la obligación de llevaros hasta el poblado. Cuando estéis en el poblado, tú Mclearn avisarás al sanitario para que venga aquí a por Monrow y Perkins. A partir de ahora el grupo más Monrow y Pekins son responsabilidad tuya-. ¡¡Tienes a 23 hombres bajo tu mando, si no quieres que a la vuelta te folle vivo, tienes que volver con al menos 15!!. Te juro por dios que si me vuelves con menos hombres yo mismo llamaré a tus padres para decirles que has muerto.¿Te has enterado Mclearn??? ¡¡Sí, mi Sargento!!

Veía al Jeep del Sargento Galizia alejándose. Pensé que ahora si que estaba de mierda hasta el cuello. Con un brazo semiroto y al mando de un grupo desmoralizado de 23 hombres. Esto si que era una situación difícil.

Jeep del Sargento Galizia.

Teórica y práctica. 1ª Parte.

15/07/1967

Sargento Instructor:

"En Vietnam, hay un alto índice de muertos y heridos por culpa de las trampas cazabobos. Esto no es más que explosivos habilmente camuflados en la selva con un señuelo tonto. Aunque parece mentira, muchos soldados como vosotros, atraídos por algo realmente simple, se han acercado y han accionado sin querer una mina antipersona o han accionado una granada. Al parecer el Vietcong está viendo que muchos soldados caen en las trampas como mosquitos en la mierda y están agudizando el ingenio cada vez mas."

"Os podéis encontrar estas trampas en cualquier sitio, en cualquier lugar, tenéis que desconfiar de todo. Nunca recoger objetos del suelo, ni pegarles patadas. Puede ser una trampa mortífera" A continuación os mostraré algunas trampas para que os vayáis familiarizando. Quiero que prestéis atención que estéis atentos. Esto os puede salvar las vida"

"Normalmente, las trampas están por el suelo. Una muy común,es sobre una fina capa de tierra y maleza se encuentra una agujero el cual contiene estacas punji embadurnadas con excrementos.Estas estacas se te clavan en el pie te lo atraviesan y debido a los excrementos se infecta. Otra variante, como la anterior pero esta te hiere hasta el tobillo."

"El Vietcong, está haciendo fosos donde cabe una persona y lo mismo que las anteriores, con estacas afiladas embadurnadas con excrementos. Esta es mortal, si tenemos asistencia sanitaria de inmediato estaríamos muertos en cuestión de poco tiempo"

"Otra, al pasar por caminos con palmeras teneís que estar atentos, existe la trampa del péndulo. Consiste en en un coco o bola, con estacas incrustadas. Al pasar caminando activamos sin querer con el pie un fino alambre y este a su vez activa el péndulo que nos podría dar en la cara.

"Granada,lata,cable, lo mismo accionamos esta trampa andando tranquilamente, la granada está dentro de una lata y al tropezar con el cable tiramos de la anilla y se produce la explosión.Lo mismo pasa atravesando los ríos, estas trampas también se pueden encontrar dentro del cauce del río. Cuidado con el paso en las acequias, existen puentes que con tu propio peso se pueden hundir y te quedas empalado con estacas"

"Especial cuidado al entrar en propiedades de estos campesinos como en la puertas de las chozas, nos podemos encontrar desde mecanismos que se activan abriendo las puertas y hace explosión una granada hasta lo mas común. De nuevo una tabla de madera en forma de cruz provista de clavos bastante grandes. Al abrir la puerta nos puede empalar. Hay que estar atentos con los cadáveres al moverlos podemos accionar una granada" 

"Por último deciros que aparte de las consecuencias mortales que tienen estas trampas, existe otra consecuencia que es la psicológica. Los soldados al ver como sus compañeros mueren y son heridos por estas trampas se van desmoralizando poco a poco. Estas trampas os mantendrán continuamente estresados y con brotes de paranoia. Porque no sabréis donde podría estar la próxima trampa. Estas trampas también estas hechas para disminuir la capacidad combativa de un pelotón. Ya que si un compañero está herido hace falta otro compañero para transportarlo y eso lo sabe el enemigo".

"Bien, hasta aquí la parte teórica, mañana entrareis en la práctica. Os tengo preparado un circuito de 10 km donde puede que esté lleno de trampas, para que sepáis como funciona. Lo haremos a las 11 en punto de la mañana esperando a que el sol se posicione fuerte en nuestras cabezas y con todo el equipo".

Hasta mañana.  

Basic training.

Como una imagen vale más que mil palabras, he aquí unas cuantas imágenes.

Os invito a visitar el recién estrenado canal en youtube. Poco a poco iré subiendo más videos.  Gracias.

http://www.youtube.com/user/Miguerradevietnam

De guardia.

12/07/1967

Son casi las 2 de la madrugada, hoy me toca guardia de noche.Consiste en estar de guardia dando vueltas por dentro del barracón, la duración son de 2 horas. Cada 2 horas se hace el relevo. Hay que estar acostado pronto, a las 10 de la noche todo el mundo tiene que estar en la cama. Se apagan las luces y no tiene que escucharse ningún ruido. Eso es en teoría, muchos roncan y como roncan, yo me incluyo. De 2 a 4 es la peor hora. Pilla en medio de las horas. Las guardias son de 10 a 12, de 12 a 2, de 2 a 4 y de 4 a 6 de la mañana.

El sargento duerme a pocos metros de nosotros y ha dicho que tiene el sueño muy ligero. Cualquier percance, cualquier incidente que sucediera dentro de nuestra guardia acarrearía el arresto.

El tiempo que llevamos aquí, esta es la primera vez que hacemos guardia de barracón. No me extrañaría nada que el Sargento iniciara una inspección sorpresa. Aunque se apagaron las luces a las 10 de la noche y ya hace tiempo que tendría que estar durmiendo, no tenía sueño.Esperaba mi turno. 

A las 2 en punto, ni un minuto más, mi compañero Fremban, vino a relevarme. Me dió su linterna provista de una luz de color rojo para no deslumbrar a los demás. Comienza mi guardia. Fremban me desea suerte, como si de alguna manera supiera lo que iba a suceder.

Mi primer paseo alrededor de el barracón fue dado sin problemas todos aparentemente dormían. Cogí una silla y me senté más o menos en la mitad de la habitación para tener controlado el sitio. En un momento determinado, casi al final de la habitación escuché como unas tímidas risas. Al principio no le dí importancia. Esas tímidas risas poco a poco se fueron transformando en risas escandalosas. Reaccioné y me acerqué rápidamente al final de la habitación. Pararon las risas. No encontraba al risitas. Cuando me dí la vuelta y anduve como 5 metros volvieron las odiosas risas.

Ahora sí que lo localicé, era Berris un hippie anti-guerra. Lo había visto fumar a escondidas unas cuantas veces. Y no precisamente tabaco, sino marihuana. Berris no paraba de reirse, estaba despertando a todo el ala oeste del barracón. Eso era un problema. Su cama daba a una ventana entreabierta, donde supongo que habría estado fumando.

-¡Callate jodido hippie, vas a despertar a todo el barracón incluido al sargento! dije yo. Sabía que si no lograba callarle nos meteríamos en un buen lío. Estaba tan nervioso que no me daba cuenta del olor tan grande a marihuana que venía de la cama de abajo. Era Kenner. Kenner también se quería unir a la fiesta y se estaba fumando un porro tan tranquilo en la cama. Berris no paraba de reírse y era cuestión de tiempo que el Sargento se despertara. Las risas de Berris y olor a marihuana que desprendía Kenner era escandalosamente notorio.

Los compañeros de las camas de al lado se despertaron y me lanzaron la advertencia de que como no callase a Berris el sargento me iba arrestar. Como si yo no supiera las consecuencias que tendría esto para mi. 

No conseguía callar a Berris, de repente se me ocurrió una idea. No sabía si iba a funcionar pero no tenía alternativa. 
Si conseguía pegarle un puñetazo y dejarlo inconsciente estaría salvado. Lo voy a intentar. 

Berris no paraba de mover la cabeza de las risas que tenía. En un momento dado su cabeza se puso en perpendicular a mí. Sin pensarlo le dí un puñetazo en el pómulo. No estoy seguro si le dí fuerte o flojo, pero conseguí dejarlo inconsciente. Pararon las risas -uff, menos mal. Pensé. Ahora solo falta Kenner, le quité el porro de la boca y lo tiré al suelo aplastandolo, seguidamente lo tiré por la ventana. Kenner no reaccionó, simplemente se quedó parado, como ido. Se dio la vuelta y se puso a dormir. Increíble pero cierto.

Para cuando me quise dar cuenta, ya eran casi las 4 de la madrugada. Ahora lo que me preocupaba era el olor a marihuana. Como estamos en verano todas las ventanas están abiertas. Espero que poco a poco se vaya disipando el olor. Le dí el relevo a Serrus y le advertí del incidente de esa noche. Serrus no empezaba bien la noche con mis noticias pero al final no pasó nada más. A la mañana siguiente, desayunado le expliqué todo lo sucedido a Berris, no se lo tomó muy bien. Pero no tuve más opción.

Rifle M-14, mi novia.

10/07/1967

El rifle M-14, según el Sargento este arma en un momento determinado nos puede salvar la vida. En este instante  nos hacemos cargo de un rifle. Tendremos que ir con él donde vayamos. A comer, dormir, ir al baño, haciendo instrucción etc, todo el día. Será como nuestra novia. Esta será el arma con la que ganaremos al vietcong. El vietcong esos pequeños hombres campesinos con apariencia debíl, es imposible que nos ganen. No tienen el armamento que nosotros tenemos. Simplemente por este dato es imposible fallar. 

Pero entonces ¿por qué en lo que llevamos de conflicto han muerto cerca de 16000 compatriotas y todavía parece no tener fin? No creo que sea tan fácil acabar con esta gente en su terreno.

Cuando me dieron por primera vez el arma, me sentí poderoso. Juez de jueces, tenía en mis manos la posibilidad de matar o dejar vivir. Yo decidía.
Este es el arma con el que tendremos que luchar en la selva. Lo primero que tenemos que aprender es familiarizarnos con las funciones y características del rifle.

Calibre es de 7,62mm, utiliza la munición de 7,63x51mm. Tiene un alcance efectivo de 700 m y un alcance máximo de unos 1500 m. Utiliza un cargador desmontable metálico con 20 proyectiles y pesa algo mas de 4 kilos.
La primera vez que lo utilicé lo puse en modo automático y es imposible de manejar, desperdiciaba mucha munición. Es mejor ponerlo en modo semi-automático. También nos hemos puesto a montarla y desmontarla. El arma tiene que estar bien lubricada y cuidada porque en la selva donde hay muchísima humedad tienen fama de atascarse mucho. Y hay que evitar lo máximo posible que esto pase.

Ver a toda la compañía intentando montar y desmontar el rifle era todo un espectáculo. Yo en mi afán por montar y desmontar lo más rápido posible, me paré un momento y alcé la vista. Vi a todos mis compañeros en mitad del césped, todos con sus rifles, era digno de ver. El sargento hoy tenía una inusual paciencia. Explicaba con sumo cuidado como se tenían que hacer las cosas y siempre decía que le preguntáramos las dudas.

El rifle será un elemento que siempre estará presente en estas semanas de entrenamiento básico.
Hubo algún incidente como no podía ser de otra manera, además con chicos de 20 años que nunca han tocado un arma es normal. Me referiré a uno que casi le cuesta la vida a un ayudante del instructor.

En el campo de tiro todos estábamos disparando a la vez. El ayudante del instructor observó algo anómalo en un soldado. Tocó en el hombro del soldado y este en vez de girar solo la cabeza, giró todo el cuerpo incluido el arma. Al girarse el arma apuntaba al ayudante, este rápidamente reaccionó y levantó el arma hacia el cielo. El rifle soltó una ultima ráfaga. El ayudante gracias a su gran actuación salvó su vida, eso era muerte segura. El rifle, al parecer lo tenía en modo automático, no estoy seguro, pues no paraba de disparar. El compañero aunque la acción no fue itencionada fue arrestado 2 semanas.

Mis números en el campo de tiro son pésimos, tengo que mejorar urgentemente. Disparé en pié y acostado. Pero el rifle es de momento, un poco difícil de manejar, es bastante potente. Tengo que seguir mejorando y más sabiendo que cuando entre en combate real el vietcong no tendrá dudas y querrá matarme. No puedo dejar ningún cabo suelto.

Por cierto, en dos días tengo que hacer mi primera guardia por la noche dentro de la compañía. Lo han hecho por sorteo y me ha tocado a mí y a otros 5 compañeros. Espero que sea tranquilo y no tenga ningún incidente. Pero eso nunca se sabe. 

 

  

Más difícil de lo que parecía.

08/07/1967

Llevamos cuatro días y esto es lo más parecido a una cárcel. Aparte de este calor infernal que puede llegar a más de 35 grados, se une las ganas de fastidiarnos por decirlo delicadamente del Sargento instructor Galizia. El día empieza por lo general temprano muy temprano. Es habitual que el instructor diga la noche anterior que al día siguiente tocará diana a las 6 de la mañana y que luego sea mentira. A las 5:30 AM o incluso 5 de la mañana se ha acostumbrado a tocar diana el Sargento. El cual viene aporreando la papelera un día sí y otro también. Ese sonido lo tengo metido dentro, es bastante desagradable.

Hay que estar listos en menos de 10 minutos con la cama bien hecha. Precisamente lo de no tener bien la cama hecha fue lo que le costó a 3 compañeros pasar toda la mañana haciendo las camas de toda la compañía incluido fregar el suelo y los baños.

Después de desayunar a la carrera, toca formar y el sargento pasa revista. A continuación si todo está correcto pasamos a correr unos cuantos kilómetros antes de las horas centrales, es bastante duro, porque algunos no aguantan las carreras y se retrasan del grupo y a esos siempre les toca repetir las cosas una y otra vez.

Hemos aprendido también a montar y desmontar el rifle M-14, al principio es difícil, pero cuando lo haces unas cuantas veces te sale solo. A parte de montar y desmontar el rifle también tenemos que ensayar las diferentes posturas del rifle sobre el cuerpo andando a la vez. Nos examinan diariamente, si no se hacen las cosas bien, se castiga haciendo unas cuantas flexiones o corriendo alrededor del perímetro de nuestra compañía.

Aprendemos técnicas de lucha, cuerpo a cuerpo y con el rifle añadiéndole una bayoneta. Mientras estábamos luchando con nosotros mismos haciendo un poco el tonto y riéndonos pensaba, ¿acaso somos conscientes de lo que nos espera?. Viendo la cara de felicidad de todos esos muchachos era evidente que no.

Campo de obstáculos, arrastrarnos por el suelo pasando debajo de unos maderos o incluso alambre de espino. En cierta ocasión un chico bastante corpulento tenía que arrastrarse por el suelo y pasar a través de ese hueco con alambre de espino, digamos, que no era de su tamaño pero aún así el Sargento le obligó a realizar la prueba. Al final pasó pero su ropa y su piel fue desgarrada por el alambre causándole unas heridas bastante importantes, le trasladaron a la enfermería.

De momento no tenemos nombre, sólo somos un número, el cual coincide con nuestra taquilla y cama, yo soy el 32. Cada día se realiza un sorteo para repartirse las tareas de la compañía,como guardias limpieza, cocina etc. Mañana a mí y a otros 7 más nos toca estar en cocina, pasando horas y horas pelando patatas fregando cacharros y limpiando el comedor de la compañía, lo bueno que tiene es que por lo menos mañana no pasaré hambre. 

Ha sido unos días agotadores, de no parar. Esto es grandísimo es como una fábrica de hacer soldados, cada 3 semanas se gradúa una compañía para ir a Vietnam. Nosotros ya tenemos fecha el 4 de septiembre nos graduamos, los que no superen las pruebas volverán a repetirlas hasta que las superen. Ya han dicho algo de iremos a Pleiku al sur de Vietnam. Aquí estamos aislados, no sabemos como va la guerra, sólo sabemos los que nos va diciendo el Sargento que es muy poco. Probablemente las noticias nos sean muy buenas.

He podido llamar a mis padres, les he dicho que estamos muy bien y que ya estamos adaptados. Lo importante es no hacerles sufrir más de lo que están sufriendo. Así que hay que ser positivo.

Estoy cansado, quiero dormir. Ahora mismo desde mi cama, observo a mi compañeros hablando, riendo, pasando de un sitio a otro y pienso en que nos deparará el futuro. Es mejor no pensarlo voy a dormir.

Día cero

05/07/1967

Ya estamos aquí, después de un duro y angustioso viaje de 12 horas, al fin llegamos a nuestro destino. Fort Lewis. Llegamos a eso de las 8:30 de la noche, cansados y con bastante hambre. Fort Lewis es grandisimo es como una ciudad metida entre unas murallas. No me dio tiempo a ver mucho. Al bajar del autobús un oficial, nos ordenó que bajáramos rápidamente de forma bastante agresiva.

Nos pusimos en fila, uno delante del otro, todos con nuestras maletas en la mano. No eramos los únicos que habíamos llegado a esas horas al cuartel. Coincidimos con otros grupos de chicos, no recuerdo cuantos, pero muchos. Después de al grito de ¡a formar todo el mundo! nos pusimos en marcha siguiendo al oficial.

Llegamos hasta la peluquería, pero, ¿había que cortarse el pelo a las 9 de la noche?.Pues parecía que sí. Habían chicos que tenían el pelo bastante largo, una pena. A mi por suerte me gusta llevar el pelo corto y no hubo que cortarme demasiado. Los peluqueros iban tan rápido que muchas veces se les quedaba enganchada la maquina y ya se oía a alguno chillar.

Por fin pudimos cenar algo, nos metieron en una especie de comedor grandisimo donde por orden nos sentábamos y ya en las mesas teníamos un triste bocadillo y una bebida. Nos obligaron a terminar bastante rápido.

Lo siguiente, darnos un petate y meter las sabanas que nos iban dando por riguroso orden. Formamos por grupos y a cada grupo se nos asignó un barracón. Cuando ya estábamos metidos dentro, vino el que sería nuestro instructor el Sargento Galizia, aporreando desde la entrada una papelera y voceando para ser escuchado. Parecía latino, llevaba un casco negro y gritaba mucho. Nos dijo que teníamos que hacer la cama en menos de 5 minutos y que apagarían las luces en 10 minutos. Rápidamente mis amigos y mi primo elegimos literas yo en la de abajo y mi primo arriba Fred, Brian y Fred pudieron coger camas más adelante. Eran más de las doce de la noche, estábamos cansados.

Al día siguiente se suponía que iban a tocar diana a las 6 de la mañana como dijo el sargento la noche anterior. Pero no fue así eran las 5 de la mañana cuando se encendieron las luces y otra vez el Sargento iba de una punta a otra aporreando la papelera y voceando.

¡Teneis menos de 10 minutos para vestirse, hacerse la cama y salir a formar! ¡Quien no esté en ese tiempo fuera, se quedará limpiando letrinas!. Todos íbamos a la carrera, rápidamente haciendo la cama y vistiéndonos a la vez, una locura. Ahora estábamos todos fuera formando, iban a pasar lista y uno por uno entraríamos a desayunar. Después tocaría ir a vestuario para que nos tomaran medidas de nuestros uniformes y botas. ¡Ya estábamos vestidos de militar!
Es la hora de hacer un examen psicotécnico y a vacunarnos. Eran las 5 de la tarde y bajo un sol abrasador estábamos todos formados. El Sargento Galizia nos dijo que nos íbamos a trasladar a otros barracones más al sur y que teníamos que recoger nuestras cosas y presentarnos en este punto.

Nos montamos en unos cuantos camiones de traslado de tropas y llegamos a lo que ahora sí sería nuestra casa durante 8 semanas. Ya dentro de los barracones el Sargento no enseñó ha hacer una cama, como teníamos que tener distribuido la taquilla y un pequeño baúl donde guardaríamos nuestros útiles de aseo.
Nos dejaron libre lo que quedaba de tarde y el Sargento de forma amenazante nos dijo que al día siguiente empezaría nuestro duro entrenamiento militar y que a las 6 de la mañana tocaría diana. Se despidió diciendo "descansad nenas". ¿que nos esperará mañana?

Basic training

Destino Fort Lewis.

03/07/1967

Y llegó el día, al fin, hoy es 3 de julio. Anoche fue momento de despedidas de familiares y amigos entre lágrimas y risas. Nos vamos con la esperanza de volver sanos y salvos. Esta mañana teníamos una cita a las 7 en punto de la mañana en el centro de reclutamiento. Casi no he podido dormir esta noche. No podía estaba demasiado nervioso. 

Mis padres y hermanos me han acompañado hasta el centro de reclutamiento. Casi llegando, de lejos, ya se veía una multitud de gente apostada frente al centro. Muchos chicos, están en la misma situación que yo. Mi primo Cameron y mis tíos llegaron seguidamente. -Bueno Cameron, pues ya estamos aquí, parecía que no iba a llegar el día. Dije yo. -Si, yo hace tiempo que estaba dispuesto, añadió Cameron.

Habían muchos chicos conocidos, entre ellos Alex Monrow, no lo veía desde el altercado del otro día. Esta mañana se me ha quedado mirando con cara desafiante, pero yo no le dí importancia. A la que si seguí viendo después fue a Sally, fuimos a dar un paseo y hablar de lo sucedido. Aunque empezaba ha haber algo entre nosotros, no ha podido ser por falta de tiempo, lástima que me tenga que ir. De momento sólo somos amigos, dudo que cuando venga siga soltera. Por lo menos me llevo un recuerdo de ella grabado en mi cuerpo, mis morados, sobre todo el del ojo, que aunque ha mejorado bastante, todavía lo tengo inflamado.

Faltan pocos minutos para llegar a las 7 de la mañana a mi primo y a mi se nos unieron Brian, Bill y Fred. Ya estábamos todos los de nuestro grupo, ahora solo faltaba que nos dejaran juntos.
Eramos mas o menos unos 200 chicos esperando para subirnos a nuestros destinos. Para tal cantidad de personas habían 4 autobuses. Era el momento de irnos todos teníamos las famosas cartillas militares, nos despedimos efusivamente de nuestras familias. Hicimos una cola para subir, en la puerta del autobús nos esperaba un oficial controlándolo todo. Nos pusimos en la fila y poco a poco íbamos subiendo con tristeza al autobús.

Unos a otros nos animábamos, pasó un corto periodo de tiempo y ya todos estábamos en el bus. Se cerraron las puertas y el oficial se puso al principio del autobús y nos indicó que íbamos a realizar el entrenamiento básico en Fort Lewis (Washington).

Nos dirigíamos a Washington a más de 15 horas en autobús, ¡vaya!, eso si que era un fastidio. Se rumoreaba que íbamos a realizar el entrenamiento básico en Fort Carson (Colorado), más cerca de casa, pero en Washington es imposible volver.

El autobús cerró sus puertas arrancó y poco a poco se puso en marcha, miré por la ventana entristecido y saludando con las manos a mis padres y hermanos, Cameron hizo lo propio con los suyos. De pronto entre la multitud, estaba Sally que aunque tarde había venido a despedirse. Emprendemos nuestro particular viaje hacía Washington.
Mirando por la ventana estoy viendo pasar las últimas calles de mi Ogden querido, ¡te echaré de menos!. Nos vemos en Fort Lewis.   

Ojo Morado.

01/07/1967

El verano se ha instalado definitivamente. Y con él llega las actividades al aire libre y como no la tradicional feria de atracciones. Ayer viernes mis amigos y yo fuimos a la inauguración. Esta serán las últimas horas de diversión antes de irnos al ejercito. Hemos hecho un grupo de 5 amigos que nos conocemos desde pequeños. El cuál nos iremos juntos a Vietnam.
Somos Bill Anderson, Fred Utkyen, Brian Thomson, Cameron y yo.
Estos 3 amigos más mi primo son los que en principio nos conocemos, espero que nos manden a todos al mismo campamento. No es lo mismo ir a un sitio desconocido sólo que con amigos ¿no?.

Como he dicho antes nos hemos ido a la ido a la inauguración de la feria. Cuando aparcamos en el descampado había bastante ambiente, todo lleno de coches. Al salir del coche y dirigirnos a la entrada de la feria, mis amigos y yo escuchamos el sonido de un claxon irritablemente molesto. Era el inconfundible Dodge Polara rojo, del capullo de Alex Monrow que iba acompañado de la chica que me gustaba, Sally.

Venía a toda velocidad y mientras pasaba al lado de nosotros casi atropellandonos gritaba -¡Quitaros de en medio inútiles!. Rápidamente Cameron cogió una piedra y la tiró sin éxito. -¡No pasa nada!Dijo Fred, hemos venido a divertirnos, esta es nuestra última noche de diversión.

Exactamente habíamos venido a pasarlo bien, no en meternos en problemas. Pues dicho y hecho, nos lo pasamos bien nos montamos en todo lo que nos podíamos montar, tiramos al blanco, al pato, al perro.... a todo¡. En un momento de la noche, no sé por qué se me fue la vista y coincidió con la de Sally. Parecía que no lo estaba pasando muy bien, ella estaba con los amigos macarras de Alex. No veia ninguna amiga suya. Tenía una mirada de como decir sácame de aquí. Pero que podía hacer yo, era su novia. Continuamos con la fiesta.

Eran cerca de las 2 de la mañana y decidimos que era la hora de irse, estábamos cansados nos metimos en el coche y me dí cuenta que toda la parte de atrás estaba llenas de latas de cerveza vacías. ¡Jodidos borrachos, mirar como habéis puesto mi coche! Les recriminé, pero ni caso. Iban borrachos y durmiendo.  Llevé a mis amigos y a mi primo a su casa. Al último que tuve que llevar era a Brian, vivía un poco alejado del centro, a las afueras. Al volver a dirección a mi casa eran cerca de las 3 de la mañana, estaba todo desierto, solo se veian las farolas, que iluminaban timidamente la calle.

De pronto a unos 100 metros, vi la parte trasera del Dodge Polara de Alex metiendose por un callejón nada iluminado. Estaba lejos de su casa y tampoco estaban cerca de la casa de Sally. Apagué el motor y las luces y aparqué justo en frente. Era mi momento de venganza por lo de antes, iba a gastarle una pequeña broma, le tenía ganas.

Con unas cuantas latas de cerveza vacías y una pequeña cuerda se podían hacer milagros. Tardé 3 minutos en montar la broma, me dirigía hacia el coche de Alex, cuando a mitad de camino oí a Sally gritar escandalosamente. Decía algo de que no lo quería hacer y que le dejara. De pronto escuché como una bofetada y un -¡CALLA Z.... TÚ HARÁS LO QUE YO TE DIGA!. 
No hacía falta ser muy listo para saber que la estaban violando. Había que tomar una decisión, o subirme en mi coche y no saber nada o intervenir y que venga lo que tenga que venir.

No me lo pensé, me acerqué al lado donde estaba Alex, abrí su puerta y le dije -!SUELTALA¡ rapidamente Alex reaccionó y me pegó un puñetazo en la barriga y otro en la cara, me tiró al suelo. Sally salió corriendo en dirección a mi coche. Alex se despistó viendo a Sally correr, momento en el que yo desde el suelo le pegué un patada en las pelotas. Cayó redondo en el suelo dolorido. Me levanté y rápidamente Sally y yo nos metimos en mi coche y nos fuimos a toda velocidad.

-Hacía tiempo que quería cortar con él pero no sabía como, de un tiempo hasta aquí ya no era el mismo, dijo Sally.- ¿Te duele mucho el ojo preguntó preoucupada.- No, claro que no, contesté yo haciendome el fuerte. La llevé a su casa y se despidió dandome las gracias y un beso, pero en la cara. ¡Menuda noche!