26/03/1969
Todo está nublado. No veo absolutamente nada, La espesa niebla me ciega la vista. Poco a poco se va despejando, poco a poco el sol se apodera de mi vista hasta que me ciega. Veo a una persona que viene hacia mi. Me tiende la mano. Quiero verle la cara pero no puedo.
El sol poco a poco se va y deja ver el rostro de quien me da la mano. Es Cameron, no lo puedo creer. Me habla pero no puedo escucharle. Intento moverme pero no puedo. Se va, intento gritar, no me escucha. !Pero que mierda pasa¡ Cierro los ojos. Una intensa paz me recorre todo el cuerpo. Nada me afecta, estoy como levitando.
Al cabo de 10 minutos un dolor fortísimo me recorre la pierna derecha. El dolor va a mas y mas. Grito pero nadie me escucha. Me miro y ..... Dios mio, no tengo piernas nooooo. Tampoco puedo moverme. ¿Que ha pasado? De repente una voz grave y entrecortada me habla.
"Tranquilo hijo ya estás en casa" Veo la cara de mi padre... sí es mi padre. Intento hablar, pero no puedo. "No te muevas Travis, estás en casa, por fin has vuelto. Llevas un año en coma" La habitación rápidamente se llena de familiares, mi madre, mis hermanos acuden.
"!Travis ha despertado, ha despertado, que alegría¡"
Estoy en casa en Estados Unidos, ¿pero en qué condiciones?¿que me pasó?
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Utah Hospital |
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16/04/1968
Han pasado como ya dos meses, dos meses que la palabra mas utilizada es el desfase. Desfase, si, desde que volví de la cárcel vietnamita he cambiado bastante. Veo las cosas de otro modo y no llevo una vida puritana como la de antes. Intentaba separar las cosas que en mí estaban mal hechas de de las cosas bien hechas. Aquí da igual como hagas las cosas, un día más en Vietnam es un día más vivo.
A los porros y el alcohol se ha unido las putas. Sí las putas. Lo último que quieren los altos mandos es tener a soldados estresados, por eso nos han puesto un local de entretenimiento a 2 Km al sudoeste de la base. Yo nunca antes me había ido de putas, pero esto es como todo, cuando lo pruebas y te gusta quieres más. En este local corren las drogas y el alcohol a destajo. Como si no hubiera un mañana. Y en cierto modo puede que no haya un mañana.
Susi, como llamamos a la anfitriona del local, nos trata muy bien, sabe que puta necesitamos cada uno. Normalmente tenemos una asignada a nosotros, mi favorita se llama Clon, la llamo así por las enormes tetas que tiene. Para ser camboyana no está mal.
Aunque aquí es todo lujuria y descontrol, tenemos que guardar una serie de precauciones ya que estas putas amarillas tienen de todo. Más de uno ha contraído enfermedades y ha sido su sentencia de muerte. Algunas sólo quieren quedarse preñadas para que las lleves a Estados Unidos. Pero la verdad es que se encuentran que se quedan embarazadas y encima se quedan aquí muertas de asco con un bombo que podría ser su única solución pero acaba siendo un lastre.
Las misiones que llevamos ha cabo también han cambiado, la guerra se está recrudeciendo mucho. Hay muchos soldados americanos muertos. Cada semana veo como cargan los ataudes de esos pobres muchachos en una avión de vuelta a casa que los recibirá sin pena ni gloria.
En cierta ocasión cuando estábamos llevando a cabo una misión de reconocimiento, una mujer mayor suplicaba que nos fuéramos de su aldea. La respuesta fue quemar su choza con ella dentro. Ahora vamos a lo seguro sea Vietcong o no lo más probable es que muera. No queremos rehenes. También quiero destacar la capacidad de aguante de estos jodidos enanos amarillos. Teníamos indicios de que un campesino nos ocultaba algo, del interrogatorio pasamos a los golpes hasta que lo matamos. No dijo ni una palabra.
He cambiado el miedo por el odio, ahora sólo quiero matar y que no me maten, ¿sobreviré?
13/03/1968
Ha sido duro, todos estos días han sido de lo peor de mi vida. Sin duda perder a un miembro de la familia es difícil, más todavía en guerra. En esta guerra que todos nos empezamos a replantear. ¿Por qué tienen que morir chicos de 20 años? ¿por qué ha muerto mi primo? ¿quizá para que el pueblo de Vietnam del sur sea libre? es un alto precio.
El comandante Thomas tuvo un detalle y dejó que llamara a casa para tranquilizar a mis padres. Pude hablar con ellos y transmitirles que estaba bien, que por ahora había tomado la decisión de no volver a casa. La tranquilidad de mis padres pudo ser un poco mas reconfortante al saber que su hijo no había muerto todavía. Pero a la vez se abría otra herida con la que habrá que vivir el resto de nuestros días. La muerte de Cameron.
Mis tíos como es de suponer están totalmente destrozados por la muerte de su único hijo. Cameron mi primo, mi amigo. El chico con el que había crecido, con el que había compartido miles y miles de anécdotas ya no está. Para mí es un héroe, ha luchado por lo que él creía que era justo. Salvar a esta gente del comunismo.
A estas horas ya debe de haber llegado el féretro con los restos mortales a Odgen, donde mañana recibirá sepultura, junto a otros 6 chicos, también conocidos mios. La conversación con mis padres ha sido corta apenas 3 minutos, lo suficiente para despedirme de ellos hasta seguramente agosto. Digo seguramente porque estoy convencido de que saldré vivo de esta puta guerra. Esos enanos amarillos no acabarán conmigo.
En cuanto a mí... bueno digamos que ahí voy. Me cuesta mucho dormir por las noches, apenas descanso. Una de estas noches que no podía dormir, salí a las puertas del barracón. Un chico se me acercó a mí y me dijo que si quería un cigarro. Yo lo rechazé, pero el chico me dijo que no era un cigarro norma, si no que era marihuana. -Esto es bueno tío, te deja totalmente relajado no te enteras de nada además es natural. Es mejor que los pitillos.
Dudé un poco... la verdad es que hace muchas noches que no puedo dormir bien, las pastillas que me recetó el medico para el insomnio no valen para una puta mierda. Necesito algo más fuerte. Aquel chico me lió el cigarro y le pegué una calada, después otra y otra....
Yo nunca había fumado ni siquiera tabaco, pero coño, como pegaba, a los 10 minutos estaba totalmente ido. Pude llegar a la cama a duras penas. Me acosté y todo me daba vueltas. A la mañana siguiente me levante bastante mejor. Aquella noche fue la primera vez que fumé maría.
Ahora la necesito para dormir, puede que sea una adición pero es lo único que me calma.